El 18° remate anual de la cabaña garmense mostró ventas ágiles, con muy buenos valores y muchas manos
Los 18 años de remates sin dudas han sido para La Torcacita, un capital que en cada cita sigue engordando, por eso las ventas ágiles, con muy buenos valores y muchísimas manos en la tarde de este viernes.
De la mano de Juan Pedro Colombo, se presentó el remate a través de la plataforma de Colombo y Magliano, con los agradecimientos correspondientes. Desde la Angus, el dirigente y cabañero Ricardo Orazi, dio las palabras de bienvenida de la Asociación de la raza, y aseguró: “Quiero destacar la eficiencia productiva en los rodeos nacionales de esta cabaña con muy buenos resultados”.
Desde la cabaña, la hija del fundador, Ingrid Bargmann tras los agradecimientos, destacó: “Hoy es un buen momento para hacer un pequeño homenaje a los ganaderos argentinos, nos enfrentamos a distintas adversidades con creatividad para buscar nuevos viajes, eligiendo y quedándonos en la ganadería. Lo resumo en una sola palabra, pasión. Nuestro equipo refleja los valores que queremos compartir, el esfuerzo de los últimos años lo verán reflejado en la calidad de haciendas que ponemos a la venta”, cerró entusiasmada.

Para comenzar el remate, el veterinario Federico Cano, asesor y genetista de la cabaña, fue describiendo uno por uno los pedigree. El comienzo fue con “LIO” del que dijo ser el mejor padre que ha producido la cabaña, un gran toro colorado que se vendió y actualmente se encuentra en el Centro Genético Genpro. El reproductor pertenecía en mitades iguales con la cabaña pero la familia hoy comercializó el 50% de su parte (el 25% del total) llegando a 720.000 pesos.
Así con sus preofertas, los toros se fueron rápidamente, dando lugar a las terneras, donde los tríos ofertados eran única elección, algunas preñadas y la oportunidad inclusive, de comprar una vaca con cría cuyo ternero iba sin cargo. El 50% de la mejor ternera colorada de la camada 2020 se vendió en 500 mil pesos.
Tras las diferentes elecciones de vaquillonas preñadas de pedigree, fue el turno de los Puros controlados, con elecciones y también con obligaciones por más de un toro, entre negros y colorados. Al lote 7 de los tríos, dejó el martillo Juan Pedro, para que Carlos Colombo tomara la posta. Los toros sin dudas muy buscados, con manos, con preofertas, con elecciones, con alguna obligación, con mucha agilidad del primero al último, y donde los promedios hablaron por sí solos.
Sin dudas, ver que en los últimos lotes se dio el máximo de la tarde, marca la paridad de un remate que tuvo interesados por demás.

A la hora de los vientres de la mano del martillo Juan Carlos Blasco, pasaron primero las con cría, que se volaron los dos lotes preofertados, para luego tener las de primavera y concluir a toda marcha con las de otoño, todas muy demandadas.
Como siempre al cierre, fue el momento de los Simmental, la raza que es emblema de la cabaña, siempre en el afán de buscar un biotipo para cruzas carniceras, con seguidores que responden: en tres martillazos, se volaron.
A continuación, los valores:
* Informe de Infosudoeste y CAMPO Total