En términos de costos, 15 de las 19 actividades mostraron subas interanuales superiores a sus propios precios, lo que plantea una señal de alarma en el mediano plazo. En promedio simple, los costos muestran una suba interanual en noviembre del 73%, mientras que los precios sólo 47%
Coninagro publica esta herramienta para que el productor agropecuario pueda hacer un seguimiento de los indicadores que se analizan. Mirá en detalle el relevamiento de las 19 economías regionales monitoreadas por el área de Economía de CONINAGRO, con cifras que surgen del análisis realizado durante el mes de noviembre de 2021. El “Semáforo de Economías Regionales” busca simplificar la complejidad y heterogeneidad de la producción en el campo hacia una herramienta visual de análisis.
Destacados del Semáforo de Diciembre 2021:
Las que suben y bajan
El semáforo de diciembre, con datos a noviembre 2021, no muestra grandes cambios significativos respecto al equivalente de octubre, pero se consolidan los efectos negativos en las variables de seguimiento. Crecen los rojos, se reducen los amarillos y no crecen significativamente los verdes.
Los colores
10 actividades en rojo, 2 amarillos y 7 verdes.
Precios y costos
Las estimaciones de precios al productor medidos a precios corrientes, que se visualizan en el informe, que refieren a noviembre, mostraron mucha heterogeneidad en subas y bajas.
En 13 actividades los precios no alcanzan a la inflación interanual acumulada.
En términos de costos, 15 de las 19 actividades mostraron subas interanuales superiores a sus propios precios, lo que plantea una señal de alarma en el mediano plazo.
En promedio simple, los costos muestran una suba interanual en noviembre del 73%, mientras que los precios sólo 47%.
Volúmenes de Producción y Superficies: Por el lado de la producción, dado el momento de la campaña, se observan magras perspectivas productivas ya que ocurrieron eventos aislados negativos por el clima. Se estima que en semáforos posteriores esta variable va a tender a rojo por el impacto negativo en rindes esperados por la sequía. Hay 5 actividades que muestran caídas interanuales en las estimaciones de producción, mientras que 8 de ellas muestran un crecimiento respecto de la campaña anterior y el resto son estables.
Actividad forestal, una actividad con algo de respiro
Manfredo Seifert, consejero de Coninagro por Misiones explicó por qué esa economía productiva muestra síntomas de recuperación: “Si comparamos esta dinámica forestal con la de los últimos diez años, podemos observar que teníamos problemas de demanda y comercialización, pero afortunadamente en el último año y medio se amplió el mercado externo y eso generó un dinamismo en la provincia, motorizando mano de obra y dando un bálsamo de ánimo en los productores, ya que se trata de una actividad en la que invierten de 15 a 20 años”, comentó el dirigente del litoral, a lo que agregó: “Hace un año se creó en Misiones el Instituto Forestal Provincial donde estamos convocados todos los actores del sector; trabajadores, gobierno, productores, universidades, industriales, entre otros”.
“En el último año, el sector forestal viene respirando otros aires, hay otro ánimo. Esto se debe a que ha mejorado la demanda de productos de los bosques, aparejado a los productos primarios del silvicultor. No obstante, existe una sobreoferta importante de materia prima que va a tratar de equilibrarse por la capacidad limitada de las industrias para procesar esta madera y no se vislumbran a cortos o medianos plazos inversiones para revertir esta situación. Otro tema que nos ocupa en los últimos meses y nos mantiene en estado de alerta son los incendios, estamos tratando de mitigar todo tipo de foco para que no se propaguen, eso agudizado por el déficit hídrico y las altas temperaturas, complejizan la situación”, describió Seifert.
A su vez, el dirigente se refirió también a la actualidad de otra economía típica de su zona, como es la mandioca: “los precios siguen acompañando a la inflación y hay buena demanda del mercado interno, tenemos poca producción primaria porque en la primavera del 2020 se sembró lo que se cosechó en 2021. Esto no permitió levantar el stock debido al déficit hídrico y esto perjudicó al cultivo, y en esta temporada sucede lo mismo por la falta de agua, lo que provocará que en la próxima campaña, que comienza entre febrero y marzo, exista poca materia prima para procesar en las industrias. Entramos en un año donde no vamos a poder recomponer el stock de fécula de mandioca, y la demanda va a ser mayor a la oferta de materia prima, esto provocará una mejora en los precios al productor pero en los mercados traerá un efecto negativo. En Brasil y en el Paraguay hay una situación similar, es decir que en toda la región hay una baja de materia prima.