El alza de los aceites vegetales revaloriza a la soja, que volvió a los 600 dólares. Para Argentina, estas cotizaciones compensarían en parte las pérdidas por sequía que marcará la cosecha. El trigo y el maíz también registran subas importantes
La soja vale más en un contexto geopolítico de conflicto. El avance de Rusia sobre Ucrania tiene su correlato en los mercados agrícolas y este martes llevó el precio internacional de la oleaginosa otra vez a u$s 600 por tonelada. Así sucedió en el llamado “mercado nocturno”, que opera desde la bolsa de Chicago en relación a lo que sucede en horas previas en las bolsas asiáticas.
Este mediodía ya se está reflejando en la rueda diurna de la bolsa estadounidense, con subas respecto del cierre previo, en una firme tendencia alcista que, con una suba de u$s 9,55 respecto de este lunes llega a u$s 598,02 en la posición Marzo 22.
Según explicó a TN el analista de mercados Pablo Adreani, la relación de la escalada bélica en Europa del Este tiene que ver con el alza de precios de todos los aceites vegetales en el mundo, porque esa región es muy importante para el mundo por su producción de girasol. Eso conecta con la cotización del aceite de soja y, por vía indirecta, también con los valores del grano y la harina.
Este martes el aceite de soja muestra un incremento de u$s 35,05 en Chicago, y llega a u$s 1.524 por tonelada. La harina de soja, en tanto, sube u$s 6,83, hasta u$s 500 por tonelada.
“Las tensiones geopolíticas dominan las noticias del mercado, relegando los fundamentos a un segundo plano”, interpretó Esteban Moscariello, ejecutivo comercial de Díaz Riganti Cereales.
Tuvo en cuenta al respecto que el conflicto en el este europeo impacta directamente en la provisión mundial de trigo (Rusia y Ucrania representan el 30% de las exportaciones globales). Fue el grano que más trepó en el mercado nocturno (3,23%) tras los movimientos de tropas que impulsó el presidente ruso Vladimir Putin en Donestk y Lugansk.
“La volatilidad seguirá siendo dominante en el contexto actual, con grandes incertidumbres”, resaltó Moscariello. Y consignó que ello impulsó subas en torno al 2% en todas las materias primas en el mercado nocturno de Chicago, luego del fin de semana largo en EE.UU.
El maíz y la soja, cuyos factores de precios están en principio más vinculados a la sequía en América del Sur, se “contagiaron” con subas de 2,35% y 1,58% respectivamente.
En ese sentido, Fernando Perosio, ejecutivo comercial de Mariscotti Cereales SRL, indicó que “los precios fueron considerablemente más altos para todos los commodities en el mercado nocturno, debido al deterioro geopolítico en la cuenca del Mar Negro. La volatilidad seguirá siendo dominante en el contexto actual, ligada a las sanciones económicas que se puedan tomar contra Rusia o interrupciones logísticas en Ucrania”.
Las claves de la suba de la soja, más allá del conflicto
A su vez, la falta de lluvias sigue afectando tanto el desarrollo de los cultivos en Brasil, como en Argentina. Respecto de Brasil, el primer productor mundial de soja y segundo de maíz, Perosio consignó que la Conab (agencia estatal brasileña) realiza un estudio especial sobre los cultivos de soja en el sur de ese país previendo daños importantes.
Identificaron 385 puntos donde recolectarán muestras para verificar magnitud de las pérdidas. La sequía en estos cuatro estados comenzó a mediados de noviembre y continuaron hasta mediados de enero.
Las temperaturas durante ese período fueron récord o casi récord durante varias semanas. Las condiciones cálidas y secas ocurrieron cuando las semillas de soja formaban y llenaban vainas y muchos productores de la región indicaron que la cosecha soja 2021/22 es la peor que han producido.
Argentina es el principal exportador mundial de aceite y harina de soja, y el tercero de maíz. Y las actuales cotizaciones compensarían en parte las pérdidas por sequía que se esperan en la próxima cosecha.
Los pronósticos se redujeron drásticamente después de la sequía desde fines del año pasado, afectada por el fenómeno climático de La Niña por segundo año consecutivo. Según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, se espera que las lluvias abundantes lleguen a mediados de marzo para aliviar un largo período de clima seco pero, hasta entonces, tanto la soja como el maíz podrían seguir perdiendo rendimiento. (TN)