En el partido mundial de la cebada la pelota la tiene el Hemisferio Sur

La cadena global del cultivo tiene los ojos puestos en Australia (exceso de lluvias) y Argentina (sequía y heladas), cuyas cosechas definirán el volumen y la calidad que tendrá la campaña. Mientras, la pasividad compradora de China y Arabia le da calma al mercado. El informe mensual de los ingenieros Mario Cattáneo y Fidel Cortese

 

“Con la cosecha del Hemisferio Norte finalizada, todos los ojos de la cadena global de cebada, malta y cerveza están puestos en los resultados productivos del Hemisferio Sur, donde los principales productores, Australia y Argentina, se han visto afectados por complicaciones climáticas que hacen dudar sobre el volumen y la calidad de la cebada a obtener en esta cosecha 2022”, plantean los ingenieros Mario Cattáneo y Fidel Cortese en su habitual informe mensual que analiza la actualidad local e internacional del cultivo de cebada.

En el caso de Australia las lluvias en el este de ese país han complicado las tareas de recolección y ponen en riesgo la calidad cosechada. En el caso de Argentina, la sequía presente en todo el ciclo del cultivo y las heladas ocurridas en el período crítico del cultivo generan dudas tanto de calidad como de volumen producido, el que estaría al menos un millón por debajo de la producción de la campaña anterior.

“Con nuevas estimaciones de producción mundial cercanas a los 150 millones de toneladas, superiores en más de 3 millones a la campaña anterior, la actividad comercial se encuentra en un período de calma a la espera de una aparición de China y Arabia Saudita en el mercado que le genere dinámica al mismo. Los mencionados países, posicionados como los mayores importadores de cebada, continúan demorados en sus definiciones de compras”, explican los especialistas en el trabajo que publican en la página www.cebadacervecera.com.ar.

China ha importado en los primeros nueve meses de 2022 el 50% de lo importado en igual período en 2021, lo que significa más de 4 millones de toneladas menos en el flujo comercial internacional. “Las perspectivas de una disminución en la producción mundial de maíz generan un impacto positivo en los precios de los granos forrajeros, con incidencia directa sobre el de cebada forrajera. Los problemas de calidad en el Hemisferio Sur podrían generar una apertura de la brecha entre cebada forrajera y maltera”, analizan.

En su último informe el USDA mantiene la estimación de producción mundial de cebada para la campaña 2022/23 en alrededor de 149 millones de toneladas y baja en 500 mil toneladas el pronóstico de comercialización global, el que se posiciona en 29,5 millones de toneladas, debido fundamentalmente a una baja en las importaciones de China. Estos últimos datos provocan una ligera mejora en los stocks finales de la campaña.

Mar Negro

Ucrania ha confirmado una producción total de 5,6 millones de toneladas, de las cuales ha logrado exportar 1 millón de toneladas, cubriendo ya más del 50% del total de su saldo exportable de este año, con una caída importante de su participación en el mercado mundial.

“Los nuevos acuerdos para la exportación por los puertos del Mar Negro beneficiarán a otros granos, pero no a la cebada ucraniana. Y la menor siembra de invierno tendrá impacto negativo en la cosecha 2023”, plantea el trabajo.

“Por otro lado, son muy optimistas las estimaciones de producción de cebada en Rusia, las cuales aumentan cada día proyectando una producción superior a los 22,5 millones de toneladas, lo que constituiría la mayor producción rusa de cebada de la historia”.

Las últimas estimaciones aseguran una cosecha europea 2022/23 ligeramente inferior a la pasada pero con mejores estándares de calidad, lo que permitirá cubrir las necesidades de la industria continental sin problemas y sin necesidad de importación de cebada extra-zona. La siembra de cebadas invernales ha finalizado y las condiciones climáticas garantizan una buena implantación de las mismas.

“Se continúa con una situación volátil, con incertidumbre sobre volumen y calidad en el hemisferio sur y sobre el comportamiento de los principales compradores. Es importante seguir con atención la relación entre compradores y vendedores (o importadores y exportadores), así como también la producción y mercado de otros granos, como el maíz, con impacto en el mercado de cebada”, advierten los especialistas.

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