En su habitual remate mensual los Arzoz vendieron en conjunto con Sucesores de Brivio 1503 cabezas, el máximo encierre desde que comenzaron en 2019. Mucha vaca, buena calidad y valores satisfactorios
Con un encierre de 1503 cabezas consignadas por 76 remitentes, en la tarde del primer viernes de mes de junio los Arzoz y Sucesores de Brivio alcanzaron su máximo encierre desde que comenzaron con la venta conjunta en el predio ferial de la Sociedad Rural de Tres Arroyos en 2019. Mucha vaca, como es habitual en los corrales locales -con lotes destacados-; muy buena calidad de invernada; y valores de mercado y otros muy satisfactorios le dieron forma a una tarde de primavera en pleno otoño.
Que la plaza está consolidada no es ninguna novedad, lo que sí es noticia es que en este 2024 a la ya conocida calidad de la hacienda enviada por los remitentes de la zona se le agregó un volumen más que interesante. En estos primeros cuatro meses se superaron las 1.000 cabezas en cada subasta, superando ahora las 1.500 y marcando el nuevo máximo. Con otra característica: ya es habitual remisiones de jaula completa, indicando que la feria además de ser una herramienta comercial para el pequeño y mediano productor, ya también es atractiva para el que tiene más volumen.

“La cantidad de hacienda dedicada al remate se lo debemos a nuestros amigos, a los clientes que nos acompañan siempre. Y obviamente que tomamos el compromiso y la responsabilidad del caso. Hemos tenido remates muy importantes en lo que va del año y eso no pone muy contentos”, indicó Tomás Arzoz, quien estuvo a cargo del martillo.
El trámite
La venta comenzó con la salida de unos pocos lotes de consumo a valores de mercado. La continuidad llegó de la mano de una abultada oferta de 850 vacas, con muchos corrales de calidad. Aparecieron las manos para las pujas, para armar el mercado, y con agilidad fueron pasando los lotes de aptas y no aptas China.
Más de 70 toros, otro clásico de la plaza, tuvieron sus manos, para llegar a la invernada, que terminó logrando interesantes valores. El cierre fue con los vientres, que ayudados con el plazo alcanzaron valores satisfactorios.
“Ha sido un remate muy importante para nosotros, con el mayor encierre hasta ahora, y hemos logrado un resultado más que satisfactorio. Así que estamos muy agradecidos con todos los que de una manera u otra formaron parte de este evento”, comentó el martillero.
En el análisis de lo que fue la venta, Tomás destacó el embrete de vacas. “Tuvimos 850, un encierre muy grande. Entonces tenemos que agradecer que pudiéramos encontrar las manos para que pudiera salir en valores más que considerables. El resultado fue muy bueno”.
A diferencia de otros remates esta vez hubo mucho vientre también. “Normalmente no somos una feria de encerrar mucho y ahora tuvimos las 22 vacas pampa, 20 vacas negras, medio uso, también vaca CUT. Todo fue encontrando su comprador”, contó.
En el caso de las pampas, Arzoz destacó que “el vendedor pudo hacer un esfuerzo y dar los 30, 60 y 90 días, que no es una cosa menor”.
Por último, Tomás mostró su satisfacción por una tarde para el recuerdo. “Somos ferieros de alma, nos apasiona, y esto nos llena de satisfacción”. La despedida fue con el habitual anuncio, que a esta altura ya ni siquiera es necesario. “Los esperamos a todos en el próximo remate, el viernes 5 de julio”.
El detalle de las venta
