Arandú sigue destacándose, esta vez fue en la pista, pero de ventas. En Rústicos Premium los 11 toros vendidos por la cabaña que en 2023 logró el Gran Campeón de Palermo hicieron un promedio de casi 9.200.000 pesos. “Los valores superaron ampliamente nuestras expectativas. Pero lo más importante es que tuvimos compradores nuevos”, indicó Federico Vizzolini
Arandú sigue en una escalada que parece no tener mesetas. La cabaña de los Vizzolini, que en 2023 logró el Gran Campeón de Palermo -máximo premio de la ganadería argentina-, volvió a destacarse en la pista, pero esta vez fue en la de ventas. El martes, en la Sociedad Rural de Tandil, los 11 toros vendidos por la familia tresarroyense en el remate Rústicos Premium, hicieron un tremendo promedio de 9.182.000 pesos, valor que sorprendió hasta al propio cabañero.
“La verdad que los precios estuvieron mucho más arriba de lo que nosotros pensábamos. No fue una venta, fue un ‘ventón’. No pensábamos en un promedio de más de 9 millones de pesos. Superó ampliamente nuestras expectativas”, explicó Federico Vizzolini con satisfacción.
La torada de Arandú, que tuvo un máximo de 13 millones y un mínimo de 5,5 millones de pesos en Rústicos Premium, fue muy buscada, no sólo por productores que ya han comprobado su consistencia, sino por compradores nuevos. Y a la hora del análisis, eso pesa incluso más que el precio pagado. “Lo de los valores obtenidos es bueno, pero lo mejor, lo que más me gustó, es que vinieron compradores nuevos, gente que no conocíamos, como también otros que nos compran desde hace cuatro o cinco años y siguen buscando nuestros toros. Eso nos enriquece y nos fortalece. Sabemos que el producto anda porque ellos nos están apoyando en la compra, entonces te dan muchas ganas de seguir trabajando”, comentó el cabañero, que como siempre, destacó el trabajo del asesor Juan García.
“También nos llena de satisfacción que los muy buenos resultados que venimos teniendo en la exposiciones se reflejan después es los también excelentes resultados comerciales, que son fundamentales para una empresa. Y eso tiene que ver con que los animales son los mismos, lo que presentamos en la pista es lo que vendemos, y es lo que funciona en el campo”, agregó.
Vizzolini se cansó de decir a fines de 2023 que había sido un año soñado por los logros conseguidos en las pistas. Y por ahora, el 2024 sigue los mismos pasos. “Arrancamos con el pie derecho, logramos el Reservado Gran Campeón en la Exposición de Otoño y ahora hemos tenido una venta excelente. Así que no nos queda otra que seguir trabajando igual o mejor para tener más resultados”, dijo Federico.
La historia es conocida, pero no deja de llamar la atención al repasarla. La cabaña Arandú apenas tiene una década de vida. “Nos sorprende lo rápido que hemos conseguido los logros. Nosotros teníamos un objetivo: en un plazo de 15 o 16 años meternos en la conversación de las banderas importantes. Y todo se fue dando mucho más rápido”, reconoció Federico.
Consistencia genética
¿La clave? La visión del asesor técnico y el equipo de trabajo, que también está integrado por la familia. “Arrancamos muy bien desde el principio con Juan (García) que eligió muy buenas madres y elige muy buenos toros. Hoy puedo decir que Arandú tiene consistencia genética, las madres están. Venimos probando distintos padres y la satisfacción que tenemos es que la vaca que estamos usando, abriendo con otros toros, siguen dando. Eso es fundamental en una cabaña, si no se termina la producción”, contó.
“Además, tenemos toda la familia laburando, tenemos un grupo de gente trabajando con nosotros que, sigo insistiendo, tienen la camiseta puesta de Arandú. Y los resultados se están viendo”, agregó Vizzolini.
Para mantenerse en el lote de las cabañas de punta del país no se puede parar, por eso en Arandú ya tienen la cabeza puesta en el próximo gran desafío: la Exposición de Palermo. “La idea es llevar 9 o10 animales, seguramente serán toros y terneros y una sola vaquillona. Y vamos a ver qué pasa. Porque Palermo es Palermo… Van todos los mejores colegas que trabajan muy bien. Así que vamos a competir y ojalá nos vaya bien”.
– ¿Arandú va con menos presión que otros años por haber ya sacado el Gran Campeón?
– Tal vez ahora, en la previa, sentimos menos presión, y disfrutamos más la previa. Hoy todavía estamos disfrutando haber sacado el Gran Campeón. Pero todo eso se termina cuando volvés a salir a la pista. Ahí todos queremos ganar.