El ministro de Desarrollo Agrario bonaerense, Javier Rodríguez, disertó en la Mesa Redonda del Trigo. Criticó al Gobierno y defendió la inversión investigación. Luego visitó Argelanda en Claromecó
En su disertación en la Mesa Redonda Agropecuaria en el marco de la Fiesta Provincial del Trigo, el titular del Ministerio de Desarrollo Agrario de la provincia de Buenos Aires, Javier Rodríguez, expresó: “Se necesita una macroeconomía al servicio de los sectores productivos”.

A su vez, el ministro propuso “pensar en un modelo de desarrollo que permita, por un lado el crecimiento, y por otro, la mejora de las condiciones de vida de toda la población”. Con ese tono, enfatizó: “Algunos dicen que a la macroeconomía le va bien, pero a los sectores mal. Eso es imposible. Los que sostienen la macro son los sectores productivos, lo quiera o no lo quiera entender este Gobierno, que promueve la especulación financiera”.
Defensa a la investigación
Asimismo, el dirigente destacó la importancia de la investigación para las mejoras productivas del sector agropecuario: “La competitividad depende de que se siga haciendo investigación. Hoy la ciencia y tecnología se hacen vinculándose con los sectores, con actores privados, colaborando, pero también con un rol integral del Estado, aportando recursos”.
Al respecto, agregó que “el Banco Provincia está teniendo un rol clave en el financiamiento del sector productivo, y lo va a seguir teniendo”.
Argelanda: “Se puede producir con conciencia ambiental”
En el marco de su recorrida por el partido de Tres Arroyos, Javier Rodríguez visitó Argelanda, el establecimiento agropecuario ubicado en las proximidades de Claromecó. Allí fue recibido por los administradores, Margarita Tourn y el ingeniero agrónomo Marco Van Strien, quienes transformaron las prácticas agrícolas tradicionales de su campo familiar en prácticas agroecológicas.

En este predio de 400 hectáreas crece trigo, avena, cebada y triticale, pero sin usar fertilizantes sintéticos, herbicidas, insecticidas ni fungicidas químicos. Para limitar las malezas, y sostener el suelo fértil, rotan los cultivos, diversifican su producción y aplican coberturas vegetales.
“Esta es una clara muestra de que se puede producir con conciencia ambiental, cuidando la tierra y evitando potenciales agentes contaminantes”, celebró el ministro.
Y concluyó: “Este es el camino”.