Ignacio Kovarsky, presidente de Carbap, se refirió a los dichos de Javier Milei sobre las retenciones y la liquidación de granos. “La baja de retenciones tendría que ser una política de Estado en un Gobierno que viene a bajar impuestos”, dijo
Entre lunes y martes el presidente Javier Mieli tuvo un raid mediático en el que celebró con euforia la salida del cepo y más aún el efecto que tuvo en el precio del dólar y la reacción de los mercados al menos en las primeras 72 horas. Y las retenciones y la liquidación de granos integraron el menú de su verborragia.
Así fue que confirmó que el 30 de junio se terminará “el precio promocional” de los derechos de exportación, que volverán a las alícuotas de enero. Y también invitó a los productores que “tienen que liquidar, que lo hagan ahora”. Pero también, en una de sus intervenciones, indicó que “le había tirado un huesito al campo” en referencia a la baja de retenciones impuestas a principios de año.
Sobre esos dichos y la situación actual del sector habló Ignacio Kovarsky, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) con La Voz del Pueblo.
– ¿Tenías la expectativa de que el 30 de junio no se tocaran las retenciones?
– La verdad que hemos trabajado bastante para eso, llevándole números tanto al secretario (Sergio) Iraeta como al ministro (Luis) Caputo, pidiéndole reuniones periódicas para explicarle cuál es la realidad del campo argentino. Tanto a nivel Confederaciones Rurales Argentinas (entidad a la que está afiliada Carbap) como Mesa de Enlace, siempre se apuntó a esto, a que no solo no vuelvan a aumentar, sino a que ya quede como política, y así podamos ir debatiendo también un cronograma de baja retenciones hasta eliminarlas. Así que todavía está la idea de trabajar en eso.
– Y los modos que usó el presidente cuando se refirió al tema, ¿cómo les cayó?
– Sorprende un poco. La verdad es que todos sabíamos que a fines de junio terminaba (la rebaja de los derechos de exportación) y que si te pones fino con las palabras del Presidente, dijo que “los necesitan liquidar, que liquiden antes del 30 de junio” porque vuelven a aumentar. Nos dijo “si necesitan”, como que invitó a que lo hicieran, que el productor que lo necesitaba aproveche el momento.
Pero después redobla la apuesta en el programa Neura de streaming (con Alejandro Fantino) diciendo que le tiró un huesito al campo. Y la verdad que no es un huesito, es difícil de escuchar. Siempre reconoció que nos roban y nos afanan con las retenciones, entonces hacer una baja en las retenciones no es tirar un huesito, sino deber ser una política de Estado en un Gobierno que viene justamente a bajar impuestos. No son las mejores definiciones del presidente, es difícil de escuchar, sobre todo cuando en su campaña ha dicho que había que hacer desaparecer las retenciones. Incluso el campo al campo se le saca cada año en retenciones más de lo que acaba aportar el Fondo Monetario.
– ¿El campo vendió menos en comparación a otros años a esta misma altura?
– Primero, el productor no liquida, el productor vende a los exportadores, que son quienes liquidan. Y los gráficos objetivos muestran que el productor viene vendiendo a los exportadores más que el año pasado. Y que el productor especula, si claro, especula como todos. Como especulás vos cuando tenés que ir al supermercado. Hay que dejar de pensar a la especulación como una mala palabra. Todos especulan. Especula también el que corre una carrera: arranca despacio y después va más rápido. Eso también es especulación. Nosotros lo que hacemos como productores es buscar el mejor momento para la venta según precio y necesidad. Si vos no tenés nada para pagar, si no tenés ninguna necesidad, ¿para qué vas a vender un bien? Vos tenés un auto, si no lo querés cambiar, ¿para qué los va a vender? Bueno, es un poco eso. Y la verdad objetivamente es que se viene vendiendo más que el año pasado, y se va a vender en la medida en que haya que afrontar gastos, no hay otra.
– ¿Cómo definís hoy la situación del campo en general, cómo están los números?
– Es variable. En la agricultura, entre los cultivos, el girasol fue el que mejor renta tuvo este año. La soja sobre campo alquilado en un montón de lugares da pérdida. El CREA tiene un informe muy interesante que muestra que la soja no es rentable. En el caso del maíz, dependiendo la zona. En esto entran alquileres, distancias a puerto, precios de insumos, un montón de variables que definen el número.
En lo que es ganadería, en la cría con el ternero casi a 3 dólares, es un momento bueno. Más allá de que los gastos se incrementaron un montón, es un buen momento. El poder de compra del ternero hoy está bien. Lo mismo que el novillo de engorde. Mientras los granos siguen con retenciones y con precios bajos, el engorde, sobre todo si es comida propia del mismo campo es un buen número.
Lechería viene bien desde hace un año y medio. Aunque ahora está un poco planchado por tema precio, pero no es un mal año.
Después, todo va a quedar supeditado a cómo siguen las lluvias. Hoy hay falta de piso en muchos lugares, la cosecha se complica, los tambos se complican, pero vamos a ver cómo sigue el clima.
– Respecto a la licitación de la Terminal de Puerto Quequén, ¿hay alguna novedad?
– No hemos tenido novedades. Si está la tasa portuaria que se va a cobrar o se quiere cobrar por cada tonelada exportada, pero el pliego para la nueva licitación todavía no está. Nosotros lo que nos opusimos al principio, como estaba escrito, donde la provincia se quedaba con un porcentaje demasiado alto de derecho a comercializar. Dijimos que no lo queríamos, así que hay que modificarlo y quedamos ahí. La verdad que no ha habido grandes novedades al respecto.