Sigue la tranquilidad en el comercio global del cultivo, copiando al resto de los mercados de materias primas. Además, se está tomando menos cerveza que antes de la pandemia, factor que condiciona la demanda de cebada cervecera. El informe mensual de los especialistas Mario Cattáneo y Fidel Cortese
Llegamos al mitad de 2025 y el mercado de cebada muestra la misma tranquilidad con la que finalizó 2024. Es más, las expectativas para el mediano plazo no son auspiciosas en cuanto a la mejora de los valores. Así se desprende del habitual informe mensual del mundo cebadero que elaboran los ingenieros Mario Cattáneo y Fidel Cortese.
“El mercado mundial de cebada se mantiene tranquilo, con precios a la baja por la mejora en las condiciones de los cultivos en Europa y Australia. El consumo de cerveza sigue por debajo de los niveles prepandemia, lo que condiciona la demanda global de cebada cervecera”, indican las conclusiones del trabajo que los especialistas publican en el sitio especializado cebadacervecer.com.ar.
“Se observa una tendencia bajista ya que los cultivos presentan un buen desarrollo, aunque las amenazas geopolíticas continúan siendo un riesgo”, agregan.
La estimación de producción mundial de cebada se ha incrementado ligeramente como consecuencia de la llegada de lluvias en Europa y un aumento de la superficie cultivada en Australia. En cuanto a los precios mundiales, los ingenieros explican: “Han bajado en gran medida debido a la mejora de las condiciones de los cultivos en Europa, y se esperan buenos pronósticos meteorológicos que benefician aún más a los cultivos. De cualquier manera, cualquier déficit en la cobertura pluvial podría impulsar rápidamente los precios alza dado los bajos remanentes de acciones”.
Por otro lado, los especialistas marcan que “los volúmenes mundiales de cerveza, influenciados por la economía mundial, continúan sin recuperar los niveles observados de prepandemia. A comienzos de 2025 se esperaba una recuperación del mercado, pero los primeros resultados no muestran la recuperación esperada”.
Y completan: “Este hecho, además de afectar el comercio de cebada cervecera y malta, obliga a las empresas cerveceras a implementar nuevas estrategias comerciales y de oferta de productos a los efectos de revertir una tendencia que se manifiesta en los últimos dos años”.
USDA
El último informe del USDA, en coincidencia con estimaciones privadas, estima un aumento de la producción, “con una mejora de las cosechas de Europa, Australia y Rusia”. Así, la producción global se proyecta en 145 millones de toneladas. “Se estima un aumento de las importaciones por parte de China, lo que influiría en una suba del volumen mundial comercializado, aunque disminuyen las perspectivas de comercialización de cebada forrajera. Respecto al stock final, no se observan variaciones significativas y continúa siendo uno de los menores de los últimos años”.
Hemisferio norte
Poniendo el foco en Europa, “la mejora general de los cultivos lleva la estimación de la producción de ese continente a un volumen superior a los 58 millones de toneladas para la campaña 2025/26, casi 2 millones por encima de lo cosechado en la campaña anterior”, indican.
Y completan: “La mayor producción y la baja de la demanda generarán un aumento en las existencias finales”.
Corriendo la mirada al hemisferio norte pero en América, “en Estados Unidos y Canadá, la siembra de cebada en este año 2025 ha resultado la mejor en los últimos 5 años, considerando las condiciones climáticas y de suelo que han facilitado la misma”. De modo que las estimaciones hablan de una producción de 8,9 millones de toneladas para Canadá y 3 millones para Estados Unidos”.
Australia
Por último, los especialistas analizan lo que está pasando en Australia. “Lluvias irregulares han mejorado la situación hídrica en algunas zonas; en otros, como el sur y el sudeste, persiste la necesidad de humedad. De cualquier manera, los pronósticos son alentadores respecto a la ocurrencia de lluvias en las próximas semanas”.
Por otro lado, explican que “se observa un aumento de la superficie sembrada con cebada, en detrimento de la superficie de trigo y canola, por lo cual se estima un aumento la producción de cebada para esta campaña respecto a las previsiones iniciales, la cual se ubica ahora cerca a los 13 millones de toneladas (12,8 M)”.